Transcurrían las 6 de la mañana del fatal 14 de abril del año pasado 2017, seguidores y amantes del vallenato apenas despertaban, pero nunca imaginaban que faltaban pocos minutos para recibir la peor de las noticias que ha tenido el folclor vallenato en los últimos años.
Una camioneta Toyota Land Cruiser modelo 2016, donde iba el cantante vallenato Martín Elías, se desplazaba de Coveñas a Cartagena por las carreteas de San Onofre, a una velocidad máxima de 158 kilómetros por hora, y lo permitido en esas carreteras solo son 50 kilómetros por hora.
El afán de la muerte alcanzó al artista vallenato a las 7:30 de la mañana en el sector de Aguas Negras, jurisdicción de San Onofre, a partir de ese momento comenzó su lucha para no dejar a sus miles de seguidores con la tristeza de aquel que se va sin despedirse, y al que más nunca vuelven a ver.
Colombia y el mundo vallenato oraban para que el hijo, el heredero del más grande de la música vallenata, Diomedes Díaz, diera una señal de existencia, pero a las 12:45 pm del viernes santo, Martín partió de este mundo terrenal empuñando a sus dos grandes amores, Paula y Martincito.
Hoy en su primer aniversario de fallecido, familiares, amigos y seguidores, lo recuerdan como el ser más carismático, humilde y desprendido de lo material, porque donde llegaba, se sabía que estaba El Gran Martín Elías, el de los miles de amigos. Paz en su tumba.
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